Actualizado el 24 de enero del 2024
Síntomas y Agente Causante
La tuberculosis es una enfermedad causada por la bacteria de la tuberculosis, Mycobacterium tuberculosis.
Los síntomas de una infección activa de tuberculosis incluyen tos que dura varias semanas, expectoración de esputo (moco) o sangre, fiebre, sudores nocturnos, fiebre y dolor en el pecho.
Algunas personas pueden estar infectadas con la bacteria de la tuberculosis, pero no presentan síntomas. Esto se denomina tuberculosis latente. La tuberculosis latente puede conducir a la enfermedad activa. Algunas personas con tuberculosis latente nunca se enferman.
Transmisión
Las bacterias de la tuberculosis se propagan a través de gotas respiratorias infectadas, como aquellas que se dispersan cuando las personas enfermas tosen, estornudan o incluso hablan. Una persona no infectada puede inhalar gotas infectadas en sus pulmones y contagiarse.
Las personas con infecciones de tuberculosis latentes no propagan la bacteria de la tuberculosis a otros a su alrededor.
Tratamiento y Cuidado
La mayoría de los casos de tuberculosis pueden tratarse con éxito. Las personas con enfermedad activa de tuberculosis son tratadas con antibióticos y otros medicamentos que matan o controlan la bacteria de la tuberculosis. El tratamiento suele durar varios meses.
Las personas con tuberculosis latente pueden ser tratadas con antibióticos para asegurar que no se enfermen más tarde con tuberculosis activa.
En años recientes, algunas cepas de tuberculosis se han vuelto resistentes a los antibióticos. Estos casos son más difíciles y costosos de tratar, y el tratamiento puede tener efectos secundarios graves. Debido a que la tuberculosis resistente a los medicamentos es extremadamente difícil de tratar, es importante prevenir la condición. Las medidas de prevención incluyen asegurarse de que las personas con tuberculosis tomen todos los medicamentos recetados y que sean tratados con la medicación correcta.
Complicaciones y Mortalidad
Aunque la vía de infección de la tuberculosis es respiratoria, y los principales síntomas suelen ser respiratorios, las bacterias de la tuberculosis pueden propagarse e infectar otras partes del cuerpo, como los huesos y el cerebro.
La enfermedad de tuberculosis activa no tratada puede ser mortal. Aproximadamente el 3% de las personas con TB que no reciben tratamiento morirán de la enfermedad. Sin embargo, esta cifra es mucho mayor cuando una persona también tiene infección por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH). Alrededor del 18% de las personas con infección activa de TB y VIH pueden morir.
La infección activa de TB es más mortal para los niños pequeños. Es más probable que tengan complicaciones graves por la TB, como meningitis tuberculosa (infección de la membrana que rodea el cerebro).
En 2014, 9.6 millones de personas se enfermaron de tuberculosis. Aproximadamente 1.5 millones de personas, incluyendo alrededor de 140,000 niños, murieron de tuberculosis. Alrededor de un tercio de la población mundial tiene tuberculosis latente.
Vacunas Disponibles y Campañas de Vacunación
La vacuna Bacille Calmette–Guérin (BCG) se utiliza como parte de programas nacionales de vacunación en países con muchos casos de TB. La vacuna no protege a los niños de la enfermedad pulmonar causada por bacterias de TB, ni previene que la infección de TB latente progrese a enfermedad activa. Previene complicaciones graves de TB en niños, como meningitis tuberculosa. La vacuna generalmente no se usa en adultos, y la vacuna en niños no previene la propagación de la enfermedad.
La vacuna BCG ha estado en uso desde 1921. Muchos investigadores están trabajando para desarrollar una vacuna contra la tuberculosis más efectiva. La esperanza es desarrollar una vacuna que prevenga la infección por tuberculosis, lo que reduciría la carga de la enfermedad a nivel mundial y también reduciría la transmisión de la bacteria de la TB.
Recomendaciones de Vacunación
En países con muchos casos de TB, la vacuna BCG se administra a los bebés poco después de nacer. No se recomienda que los bebés con infección por VIH reciban la vacuna.
En países con muy pocos casos de TB, se puede recomendar que los bebés reciban la vacuna si es probable que estén expuestos a la TB, como por vivir en un hogar con un adulto con infección activa de TB.
En Estados Unidos, no se usa la vacuna BCG. Se usa un programa de prevención y asesoría a la gente expuesta a la tuberculosis. Y se dan antibióticos para prevenir la enfermedad en las personas expuestas o infectadas con TB latente.
Fuentes
- Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Datos básicos sobre TB. Accedido el 25/01/2018.
- Straetemans, M., Glaziou, P., Bierrenbach, A.L., Sismanidis, C., & van der Werf, M.J. Evaluación de la proporción de mortalidad por casos de tuberculosis: un metaanálisis. PLoS One, 2011;6(6), e20755.
- Organización Mundial de la Salud. Tuberculosis infantil. Accedido el 25/01/2018.
- OMS. Documento de posición sobre la vacuna BCG. Nº 4, 2004, 79. 25-40. Accedido el 25/01/2018.
- OMS. Directrices revisadas de vacunación BCG para infantes en riesgo de infección por VIH. Accedido el 25/01/2018.
- OMS. Hoja informativa sobre tuberculosis. Actualizada en enero de 2018. Accedido el 25/01/2018.
- OMS. Desarrollo de la vacuna contra la tuberculosis. Accedido el 25/01/2018.